ページの先頭です。 メニューを飛ばして本文へ
Ubicación actual Home > Español > DECLARACIÓN DE PAZ

本文

DECLARACIÓN DE PAZ

ID de artículo:0000009739 印刷ページ表示

Hoy hace 76 años, nuestra querida ciudad de Hiroshima quedó calcinada en un instante por una sola bomba atómica, que no sólo causó la horrible muerte de muchos inocentes, sino que también dejó a los que apenas sobrevivieron con profundas cicatrices mentales y físicas a lo largo de su vida, incluyendo enfermedades por radiación, ansiedad por la salud e incluso penurias económicas. Una superviviente de la bomba atómica que dio a luz a una niña después del bombardeo dijo: “A medida que fui tomando conciencia del horror del bombardeo, empecé a pensar en sus efectos y me preocupé más por mi hija que por mí misma. Cuando pensaba en el futuro de mi hija, sufría cada vez más y más, y había días en los que no podía dormir por la noche.”

“Nadie más debería pasar por esto”, este es el ruego de una superviviente de la bomba atómica que ha vivido una experiencia dolorosa y trágica que no quiere recordar y que, obligada a pensar en el futuro de su propio cuerpo y en el de sus hijos, no ha podido escapar de la ansiedad, el conflicto y la angustia que siente. Los hibakusha (víctimas de bombas atómicas) han compartido sus experiencias y han transmitido el horror y la inhumanidad de las armas nucleares, al tiempo que han expresado sus deseos de paz y compasión por los demás. Después de 75 años, los deseos y las acciones de estos hibakusha han conmovido finalmente a la comunidad internacional, y este año, el 22 de enero, entró en vigor el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares. A partir de ahora, corresponde a los gobiernos del mundo apoyar este tratado y utilizarlo como base para hacer realidad una sociedad sostenible sin la amenaza de las armas nucleares.

El nuevo coronavirus se está extendiendo por todo el mundo y supone una amenaza para la humanidad, y las naciones del mundo están unidas en sus esfuerzos para acabar con él lo antes posible. No hay ninguna razón por la que los países no puedan trabajar juntos para eliminar las armas nucleares, que se desarrollaron para ganar guerras y se han convertido en una amenaza con horribles consecuencias para la humanidad. Si queremos lograr una sociedad sostenible, no podemos coexistir con las armas nucleares que matan indiscriminadamente, y tenemos que reunir la sabiduría de la humanidad para trabajar por su completa eliminación.

El camino hacia la abolición de las armas nucleares no es fácil, pero el hecho de que los jóvenes, herederos de los deseos de los hibakusha, empiecen a actuar es un rayo de esperanza para el futuro. Un hibakusha, que dijo haber visto el infierno ese día, lega sus deseos a los jóvenes que traerán el futuro: “Quiero que todos y cada uno de vosotros hagáis lo que podáis por la paz, aunque sea algo pequeño, y mantengáis viva la paz como algo insustituible”. Lo que me gustaría pedir a los jóvenes del futuro es que sigan creyendo que no debe haber armas nucleares para que la gente que les rodea tenga una vida rica y saludable, y que sigan comunicándolo con firmeza.

No debemos olvidar que este tipo de acciones, protagonizadas por los jóvenes, serán sin duda una fuerza motriz para convencer a los políticos de que cambien sus políticas de disuasión nuclear. Helen Keller, que visitó Hiroshima tres años después del bombardeo y animó a los ciudadanos a la reconstrucción, dijo: “No es mucho lo que una persona puede hacer, pero juntos podemos conseguir mucho”, demostrando que el poder colectivo de los individuos puede ser la fuerza motriz que mueve el mundo. Si la sociedad civil, el pueblo que elige a nuestros gobernantes, puede desarrollar valores comunes para el disfrute de la paz, y si el consenso de la sociedad civil es que no necesitamos las armas nucleares, que simbolizan la naturaleza violenta del ser humano, el progreso hacia un mundo libre de armas nucleares estará asegurado. Hiroshima, la ciudad bombardeada con la bomba atómica, seguirá trabajando incansablemente para “proteger” la realidad del bombardeo atómico, “difundirla” a través de las fronteras y “transmitirla” a las generaciones futuras. Junto con las más de 8.000 ciudades miembros de Alcaldes por la Paz de 165 países y territorios, promoveremos una cultura de la paz y crearemos un entorno que anime a los políticos a cambiar sus políticas.

A medida que la situación mundial en torno a las armas nucleares se vuelve más confusa debido al estancamiento de las discusiones sobre el desarme nuclear, hay una cosa que insto firmemente a los líderes de cada país a hacer. Es necesario comprender la experiencia de la humanidad de que a un país le conviene construir relaciones amistosas a largo plazo con otros países mediante la compasión y no las amenazas, y pasar de la idea de amenazar a los demás y defenderse con armas nucleares a la idea de garantizar la seguridad de los demás basada en la confianza a través del diálogo. Para ello, espero que visiten las ciudades bombardeadas con la bomba atómica y comprendan en profundidad la realidad de los bombardeos atómicos, y que apliquen fielmente el desarme nuclear ordenado por el Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares y se sumen a los debates para que la Convención sobre Armas Nucleares funcione eficazmente.

Quisiera pedir al Gobierno japonés que acepte de buena fe los deseos de los supervivientes de la bomba atómica, que se convierta en signatario del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares lo antes posible, que participe en la Primera Conferencia de las Partes que se celebrará en el futuro, y que desempeñe un sólido papel como puente entre los estados con armas nucleares y los estados sin armas nucleares, restaurando la confianza de cada país y creando un entorno en el que se pueda trazar un camino hacia la seguridad que no dependa de las armas nucleares. Además, le pido encarecidamente que proporcione urgentemente ayuda a los que sufrieron la lluvia negra y que siga reforzando las medidas de apoyo a los supervivientes de la bomba atómica, para estar más cerca del sufrimiento de las numerosas personas que padecen en varios aspectos de su vida debido a la radiación que tiene un impacto negativo en sus cuerpos y mentes, incluidos los supervivientes de la bomba atómica cuya edad media es ahora de casi 84 años.

Hoy, en esta ceremonia que conmemora los 76 años desde que se produjera el bombardeo atómico, ofrecemos nuestro más sincero consuelo a las almas de las víctimas de las bombas atómicas y, en colaboración con la ciudad bombardeada con armas atómicas de Nagasaki y todo el mundo con el mismo deseo, nos comprometemos a hacer todo lo que esté a nuestro alcance para lograr la eliminación total de las armas nucleares y más allá de eso, abrir un camino hacia un mundo de paz genuino y duradero.

6 de agosto de 2021

MATSUI Kazumi
Alcalde de Hiroshima
Traducción: Ability InterBusiness Solutions, Inc.

Información relacionada

過去の平和宣言(平成15年(2003年)~:PDF文書)/Archive of Peace Declarations(2003~:PDF)

Descargar

DECLARACIÓN DE PAZ [PDFファイル/72KB]

Adobe Reader<外部リンク>

PDF形式のファイルをご覧いただく場合には、Adobe社が提供するAdobe Readerが必要です。
Adobe Readerをお持ちでない方は、バナーのリンク先からダウンロードしてください。(無料)


新型コロナウイルス感染症に関する情報

コロナやさしい日本語

Nota sobre enlaces

Algunos enlaces de esta página pueden conducir a nuestro sitio web en japonés.

外国人市民のための生活ガイドブック

スペイン語のバナーの画像<外部リンク>

カタポケ<外部リンク>

ひろしま公式観光サイト<外部リンク>

  • Hiroshima Peaceのバナー画像<外部リンク>
  • ザ・ひろしまブランド(英語版)
  • 広島市へ寄付